A redação da única emissora de TV pública de Porto Rico [1], TUTV [2], foi praticamente desmantelada [3] recentemente, pretensamente devido a cortes no orçamento. O presidente da Corporação de Transmissão Pública de Porto Rico [4], Israel “Ray” Cruz – que foi indicado pelo governo eleito em Novembro de 2008 – demitiu cerca de 50 funcionários [5], vários deles jornalistas. O noticiário, fundado há 15 anos, continuará no ar pelos próximos dois meses, até as últimas demissões. Um grupo de repórteres, operadores de câmera, produtores e editores não foram demitidos, mas o futuro do programa continua incerto. O governo de Porto Rico [6] já iniciou um plano financeiro que inclui a demissão de aproximadamente 30.000 servidores públicos [7].
No mesmo dia em que os funcionários do canal público foram notificados de suas demissões, a âncora Gloria Soltero mandou uma mensagem um tanto dolorosa [8] para o público durante o noticiário. A blogosfera de Porto Rico tem sido repleta de comentários sobre as palavras de Soltero, mas primeiro, segue abaixo um resumo da mensagem da jornalista:
A aquellos que dieron lo mejor de sí para nuestro taller informativo, para que eso acabara, los felicitamos, lo lograron. Entre ellos está nuestro presidente Israel ‘Ray’ Cruz, que siguió al pie de la letra lo dictado por nuestro gobernador Luis Fortuño, quien le deja saber al pueblo de esta forma que no le importa lo que acontezca con la cultura de nuestro país, y mucho menos con lo que pase en nuestro país con sus empleados públicos.
Acuérdense, pueblo de Puerto Rico y a usted, señor gobernador, que como diría nuestro querido y respetado Aníbal González Irizarry, “un pueblo sin prensa es un pueblo esclavo”. Sr. Fortuño: si su deseo es un pueblo esclavo, usted lo ha logrado.
O professor de Jornalismo Luis F. Coss diz [9] em seu blog Calahondo [10] [es]:
La solidaridad no puede ni debe ser un fenómeno pasajero. La solidaridad debe ser un estilo de vida frente a la codicia y frente a las políticas y prácticas que atentan contra la dignidad del ser humano. Celebro la respuesta de Gloria y de Ojeda ante las acciones destempladas de los patronos. Ahora nos toca a todos transformar los episodios heroicos en trabajo cotidiano, en conciencia madura para explicar lo que nos pasa hoy y el mañana al que aspiramos.
El lamento, la rabia y la indignación por el despido de empleados públicos son experimentados en estos momentos en carne propia por otro grupo de trabajadores puertorriqueños en el Canal del Gobierno de Puerto Rico. En esta ocasión, la única diferencia es que pudieron hacer uso de un medio masivo de comunicación para expresar su sentir y pedirle al pueblo que tome acción y no olvide.
Una reacción que denota la indignación por el cierre de un medio informativo que – aunque en alguna ocasión estuvo maniatado por los caprichos del partido político de turno en el poder – servía al país, sobre todo en los tiempos de incertidumbre que se viven desde comienzos del año en curso.